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Friday, September 24, 2010

Lecciones de Palestina: Salam Fayyad y los moderados construyen el pais con economia, pragmatismo y en paz con Israel



Cruzando las trincheras cavadas por años de destructivas intifadas, muros de contención, suicidas con bombas, cohetes y bombardeos , el ministro de economia palestino Salam Fayyad ha logrado resuscitar la economía del Banco Oeste, que crece desde 2007 al 10 % anual y comienza a dar esperanzas a los atribulados palestinos.

Como su colega libanes, el asesinado Rafik Hariri, Fayyad -un doctor en economia educado en los Estados Unidos- ha logrado centrar el foco de su gobierno en crear las condiciones económicas y humanas para la paz, tratando a Israel como socio y cliente antes que como adversario militar.

Introduciendo decencia en la administración de gobierno que el corrupto Arafat vació de fondos en sus cuentas personales en Suiza (es bueno recordar que 8,000 millones de dólares por año llegan a Palestina de los vilipendiados Estados Unidos, convirtiendola en el segundo recipiendario de ayuda después de Israel) , Fayyad ha logrado hacer llegar los fondos antes robados a la construcción de viviendas, infraestructura y a la exportacion de productos al exterior y muy en particular a Israel.




Mientras los extremistas árabes e israelíes usan la "causa palestina" como campo de batalla para sus conflictos ideológicos, los palestinos moderados e inteligentes como Fayyad proveen una alternativa de futuro para los jóvenes palestinos distinta del martirio y la inmolación que proponen los jihadistas, Hamas y Hezbollah.


Mas aún, el éxito resonante de Fayyad ha presionado a Hamas para comenzar a hacer lo mismo en la atribulada Gaza, reemplazando la suicida política de contrabandear cohetes y lanzarlos sobre su mercado e inversionista natural -Israel- por la de comenzar a producir y comerciar con el vecino, que crece a tasas de doble dígito y tiene una de las economías más avanzadas del mundo.






Los palestinos están recobrando la esperanza y viendo la diferencia entre la propuesta autodestructiva de una guerra que no pueden ganar y la de tener un futuro en el Medio Oriente progresista que crece en Libano y los emiratos del Golfo con inversiones millonarias, mercados financieros, rascacielos y riqueza cultural -como la demostrada por la orquesta Divan fundada por el palestino Edward Said y el israelí-argentino Daniel Barenboim o por la cada vez mas popular cadena de noticias Al Jazeera, basada en Qatar.



Lo que es más trascendente aún en las políticas impulsadas por Fayyad es el éxito que ha tenido el implantar reglas de ley que han permitido por primera vez desde la nefasta intifada de 2000, atraer inversiones, abrir mercados y construir vivienda e infraestructura en lugar de autodestruírla.
Los Fayyad, Abbas, Hariris y los progresistas del mundo árabe están demostrando con ladrillos, comercio y empleos que el problema está en adoptar un modelo económico viable, dejar de lado la violencia -negándose a ser usados como carne de cañón de la guerra fría que se ha trasladado al Medio Oriente-.

Mas aún, la fortaleza de estos pequeños oasis de crecimiento e inversión ha atraído inversiones y comercio de países oprimidos por el feudalismo corrupto como Iran -que tiene 24,000 millones de dólares de inversión edilicia en Dubai y canaliza su comercio por los Emiratos libres del Golfo mientras sus ayatollahs -que enfardan dinero en sus fundaciones fantasma- continúan ladrando "muerte" a sus odiados Estados Unidos e Israel mientras tratan con desesperación de hacer negocios con ellos.
La propaganda jihadista del Medio Oriente dominado por teocracias y plutocracias feudales -como su modelo y predecesora, la propaganda soviética que mantuvo en el limbo y la miseria a Europa Oriental por 50 años- se ha encontrado con un enemigo poderoso al que no podrá vencer: el crecimiento económico del capitalismo emprendedor.
Como en el caso de los países dominados por dictaduras en la Europa soviética, tras la apariencia de un orden monolítico y la continua diarrea de estereotipos propagandísticos generada por las dictaduras teocráticas que oprimen al Medio Oriente surgen oasis de comercio, inversión y progreso -que esconde tacos altos y ropas occidentales bajo las burkas oficiales-.
Soplan vientos de cambio.
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Referencias
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3 comments:

Bioy said...

Excelente articulo, Aron, como de costumbre con hechos y datos de la realidad que no quieren mostrar los que viven de los ayatollas y las valijas de narco y petrodolares que financian el terrorismo suicida y la espiral de violencia que prometen los arabes y los iranies entrando en una carrera nuclear.
Los moderados y pragmaticos son los unicos "progresistas". Los jihadistas, ayatollistas, castristas y bolivarianos son profundamente reaccionarios. Solo quieren volver a la Union Sovietica o a la Edad Media (o a una combinacion de ambas)

Camus said...

Coincido con Bioy. Los que se desgarran las vestiduras por los palestinos mientras apoyan a los suicidas, los cohetazos a los patios de los vecinos inermes y la dedicación full time a la violencia autodestructiva deben ser llamados por su nombre-
Fayyad y los moderados son la única esperanza de progreso para los palestinos -aunque no les convenga a los ayatollas, la monarquía saudita o los regímenes putrefactos del Medio Oriente y Pakistán-

Revel said...

La "causa palestina" ha sido usada por los gobiernos árabes para justificar sus dictaduras y gastos militares (que usan para reprimir a sus propios disidentes) y por la extrema derecha e izquierda europeas para negarse a aceptar el derecho a coexistir (como lo hicieron por 3,000 años antes de 1948) de palestinos y judios con sus propios estados y religiones.