En su reciente libro "Ejercitos invisibles:una historia epica de la guerra de guerrillas desde la antiguedad hasta el presente", el historiador militar Max Boot analiza en detalle los éxitos fracasos y resultados de la guerra de guerrillas desde la Guerra del Peloponeso hasta el moderno terrorismo jihadista, pasando por varios capítulos aleccionadores sobre la "era de oro" del "guerrillerismo" de los sesentas y setentas en Asia África y América Latina.
En 800 paginas divididas en 8 libros y 62 capítulos con profusas estadísticas y mapas Boot expone las razones de la persistencia de la guerra de guerrillas como táctica -de hecho, mas frecuente que las guerras entre ejércitos formales-: su bajo costo para los insurrectos y alto para los que los combaten con ejércitos profesionales limitados por leyes de guerra, décadas de sangrías a los presupuestos militares, desgaste mediante la propaganda de quienes financian o usan de "proxys" a guerrilleros y terroristas y cansancio de las mayorías que entregan sus hijos e impuestos a los ejércitos que las combaten.
El analisis de siglos de experiencia historia realizado por Boot demuestra que -contra la creencia popular- la guerrilla y el terrorismo fracasan el 90 % de las veces en tomar el poder o derrotar militarmente a los ejércitos formales, y que -cuando lo logran- crean dictaduras y regimenes sangrientos mucho peores que los que pretendían combatir.
Los hermanos Castro tardaron 54 años tratando de crear "el hombre nuevo" para reemplazar a una dictadura militar pro-americana que mantenía a Cuba en la pobreza sistemica viviendo del turismo sexual americano y europeo por una dictadura militar anti-americana que mantiene a Cuba en la pobreza sistemica viviendo del turismo sexual americano y europeo.
Aun cuando llegan al poder, guerrilleros y terroristas suelen fracasar estrepitosamente en crear sus utopias sociales: Mao condeno a 15 millones de chinos a muertes por hambrunas, Castro a cubanos a vivir de las dadivas de parientes exilados en el capitalismo o de los subsidios inestables de la Union Sovietica y Venezuela. Una vez desaparecido el lider guerrillero devenido dictador, el regimen creado durante decadas se desmorona en meses, como en los casos de la URSS, Europa Oriental y China.
Vietnam tuvo que esperar a la muerte de Le Duan para volcarse al "comunismo de mercado", convirtiendose en principal socio comercial de los Estados Unidos, agasajando al odiado George Bush con orgullosos desfiles de carritos de compras que muestran la prosperidad de sus supermercados.
El Che Guevara fracaso y fue rechazado por la mayoría de la población en sus aventuras mesiánicas en Angola y Bolivia.
Pero en los circulos de lo que el escritor Tom Wolfe describió magistralmente en un articulo publicado en 1970 como "Radicalismo chic" -citando una fiesta que el compositor Leonard Bernstein (como muchos otros ricos "progresistas" de la época dio para agasajar a los Panteras Negras, donando dinero para su "causa", luego descripta por el muy progresista New York Times como:
Thomas Wolfe no ahorro detalles para el escarnio al reportar situaciones en la fiesta en las que una docena de Panteras Negras colectaban dinero de un centenar de miembros de la sociedad neoyorquina -en su mayoria de Hollywood, Broadway, las artes y de la colectividad judía- a los que en la misma sesión trataban con desprecio como "enemigos de clase"."La emergencia de los Panteras Negras como los romantizados niños mimados del jet set político-cultural es una afrenta a la mayoría de los americanos de raza negra. Este autodenominado "partido", con su confusión de ideología Maoista-Marxista y para-militarismo fascista tiene pleno derecho a la protección de los derechos constitucionales de sus miembros. Fue para asegurar que esos derechos no fuesen violados por persecución disfrazada de acción policíaca que se ha organizado recientemente un grupo de distinguidos ciudadanos (dirigido por Arthur Goldberg para investigar posible brutalidad policial). En contraste con estos, la soiree para "terapia de grupo" combinada con recolección de fondos realizada en el departamento de Leonard Bernstein representa la clase de farsa que degrada por igual a quienes respaldan y a sus respaldados, bajo la intención de crear un nuevo mito, según el cual los Panteras Negros son hermosos y elegantes paladines de la justicia".
Los Panteras Negras escribian en aquel entonces versos como estos en su organo oficial, la revista homonima -que reproducimos en ingles para conservar la rima-:
"Jew-Land:
Jew-Land, on a summer afternoon, Really, couldn't kill the Jews so soon,No dig. The Jews have stolen our breadTher filthy women tricked our men into bedSo I won't rest until the Jews are dead...In Jew-Land, Don't be a Tom on Israel's sideReally, Cause that's where Christ was crucified"(Black Panther, June 1967 issue)
Nada diferente de lo que ocurrió en América Latina en los mismos setentas con los "intelectuales comprometidos" y muchos miembros de las clases mas acomodadas -como los que fundaron ERP, Montoneros o se subieron al Granma con los terratenientes Castro o los rugbiers del San Isidro Club como Guevara Lynch- entregaron bienes y las vidas de sus hijos al establecimiento por la fuerza de dictaduras que buscaban -y en muchos casos lograron- eliminarlos reemplazando un orden social injusto por otro aun mas despiadado.
Durante los sesentas y setentas -la era que Boot llama la "mistica guerrillera", los grupos violentos fueron propagandizados y apoyados por los intelectuales "progresistas" en prensa, filme y -sobre todo- desde las cátedras de ciencias sociales y humanidades paradojicamente dominadas por el marxismo y el "socialismo nacional" a partir de la expulsión de los profesores competentes en las purgas anticomunistas lanzadas por los regímenes militares.
Los libros de texto mas frecuentes -cuando no los únicos que se estudiaban con la mas acritica devoción evangélica en todas las materias de las carreras de ciencias sociales y humanidades eran "Los conceptos fundamentales del materialismo dialéctico" de Martha Harnecker (actual asesora de Hugo Chavez en Venezuela), "Las venas abiertas de America Latina" de Eduardo Soriano, "El hombre y el arma" del general vietnamita Nguyen Vo Giap y diversos panfletos revisionistas que reescribían la historia para hacerla culminar indefectiblemente en el abandono de los libros por las armas y la inevitable toma del poder.
Lo que en realidad ocurrió -como saben todos los sobrevivientes- fue un suicidio colectivo de una generación dirigida hacia el holocausto frente a fuerzas militares infinitamente mas poderosas y mejor preparada siguiendo planes militares delirantes elaborados por la llamada "conducción", un minúsculo y autoritario grupo de dirigentes (en el mejor estilo bolchevique) prontamente refugiados en lujosos "exilios" en Paris (donde negociaban con los militares),
Madrid y México, desde donde seguían enviando instrucciones para combatir aun después de masacrantes derrotas y pasadas décadas de dictaduras militares, a las mismas democracias que se suponía eran su objetivo.
En el caso del Medio Oriente, Boot traza un perfil del siniestro Yassir Arafat, un experto propagandista nacido en Egipto que nunca tiro un tiro (a pesar de lucir siempre traje de fajina y revolveres) y se nego a firmar una acuerdo de paz en Oslo que hubiese dado a Palestina los limites y soberania que aun sigue reclamando para lnzar dos "intifadas" que costaron miles de vidas palestinas y el hambre y fracaso de otra generacion.
En el interim, Arafat guardo en sus cuentas numeradas 8 mil millones de dolares del OLP que aun siguen disputando su viuda y autoridades y nunca llegaron a manos de los palestinos necesitados, mientras financiaban las masacres terroristas de Karhtoum, las Olimpadas de Munich de 1972, y los 100,000 muertos en la guerra civil del Libano entre druzos y palestinos.
Cuando Gadafi le sugirió suicidarse como protesta para avanzar su causa y dar ejemplo a sus seguidores, Arafat declino la oferta gentilmente, no sin enviar jóvenes suicidas a inmolarse volando micros y embajadas durante la segunda intifada con la que respondió a la oferta de paz de Camp David (que hubiese dado a Palestina los limites que sigue pidiendo 13 años y miles de muertos después).
Siguiendo un plan previo de hacer fracasar las negociaciones como lo explicara públicamente su ministro de comunicaciones:
El "relato", explica Boot, fue el único frente en el que Arafat gano batallas, con el decisivo apoyo de la progresia americana y europea embelesada con la poetizacion de la violencia y miseria ajenas. Uno de los efectos de este "relato" ha sido la desaparicion de millones de dolares de ayuda internacional "al pueblo palestino" en los cofres de los sucesores de Arafat:
El libro de Boot es una fuente documental de lectura imprescindible para comprender los mecanismos por los que la America Latina de los setentas fue enviada al holocausto y los que la version "bolivariana" de comienzos de este siglo usa para justificar el caos y la autodestruccion del lumpen-populismo.
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