Obama: Triunfo en política exterior, fracaso en economía doméstica

El anuncio de la captura y muerte de Gaddafi, además de completar la caída de 4 dictaduras con récords de duración (30 años promedio), latrocinio (30,000 millones de dólares robados por dictador) y genocidio (50,000 muertos y torturados por dictador), representa una victoria para la política lanzada por Barack Obama en su discurso de 2009 en la Universidad de El Cairo

Luego reforzado por la secretaria de Estado Hillary Clinton y el mismo Obama

En el que anunció una nueva política de apoyar las rebeliones democráticas sin poner tropas en el terreno, iniciando el retiro de Iraq y Afghanistán con fechas ciertas.

Usando tropas especiales en operaciones relámpago, los comandos americanos localizaron a Bin Laden escondido a 30 km de la capital de Pakistán -que recibió 8,000 millones de dólares por año para encontrarlo y los usaba para esconderlo y armar al Talibán- sin perder una vida americana ni otra que la de Bin Laden

Y con los mismos drones Predator con los que paralizó al Talibán en Afghanistán y Pakistán -que por supuesto, se quejan de ello-

localizó y asestó el golpe de gracia a Gaddafi tras proteger a los rebeldes con la ayuda de la NATO y sin poner un soldado en territorio libio

Y dió su apoyo a la creciente rebelión en Irán sin intervenir directamente

En el rubro política exterior, Obama -como sus predecesores Carter y Bush I- ha sido un éxito notable (aunque aún le falte lograr un acuerdo entre Israel y los palestinos), demostrando que una política de uso del poder sensata y apoyando los movimientos democráticos es más eficaz -política y económicamente- que el uso ciego de tropas e invasiones indeterminadas que han dejado 2 trillones de deuda en sus manos (las guerras de Iran y Afghanistan se pagaron por 8 años emitiendo Bonos del Tesoro que ahora hay que pagar).

Lo ha hecho a pesar de que en muchos países del Medio Oriente y Africa -Tunez, Libia, Siria, Nigeria, Mogadisco - los rebeldes piden tropas americanas -un poco de sano y viejo imperialismo para librarse de sus torturadores y ladrones locales-.

Los ratings de popularidad volverán a subir como tras la muerte de Bin Laden, por un tiempo, pero el albatros sobre Obama -como sobre Carter y Bush I- es la persistente recesión y el alto desempleo, en un país acostumbrado a recuperaciones rápidas. Los datos de aprobación de Gallup antes de la victoria libia así lo demuestran

Jummy Carter y George H, Bush antes de él perdieron la reelección a pesar de haber logrado los acuerdos de paz de Camp David y la liberación de Kuwait, respectivamente.

Ningún presidente americano desde Frnaklin Roosevelt ha sido reelegido con más del 7 % de desempleo, y si bien la economía mejora, lo está haciendo lentamente, amenazada por la crisis europea y la potencial crisis china.

Pero nadie le quita lo demostrado ni la victoria que hoy, ha forzado incluso a sus rivales internos a reconocer el éxito de su política.

Se ha ganado ya el Premio Nobel de la Paz que le regalaron a poco de asumir.