La larga causa de la AMIA cobro una nueva y ominosa dimension institucional cuando la Presidente de Argentina, Cristina Fernandez de Kirchner, fue imputada por conspiracion para encubrimiento y obstruccion de la Justicia, a dos decadas del crimen que en 1994 cobro 85 vidas en pleno centro de Buenos Aires
y sin ningun detenido por una causa que hace el mismo tiempo tiene acusados profugos de Interpol que son hoy funcionarios del gobierno de Iran, con el que el acutal gobierno de la Argentina firmo un pacto para no extraditarlos que fue declarado inconstitucional por su propia Justicia
Cuando el fiscal Alberto Nisman presento una acusacion de conspiracion para obstruir la justicia contra la presidente de la Nacion
para luego aparecer muerto por supuesto suicidio el dia anterior a su presentacion ante el Congreso y cuando habia combinado entrevistas con cadenas como CNN internacional el dia anterior
El caso cobro una ominosa semejanza con el caso Watergate (1972-74):
En aquel caso -como en el de Argentina- el presidente Nixon comenzo declarndose inocente, con una famosa declaracion de "no soy un hampon" (I'm not a crook) que precedio a su habitual cargo contra la prensa por "conspirar" en su contra.
Para luego descubrirse las grabaciones que lo incriminaban en la conspiracion
Y que luego provocaron su renuncia para evitar su destitucion por juicio politico
Para luego descubrirse las grabaciones que lo incriminaban en la conspiracion
Y que luego provocaron su renuncia para evitar su destitucion por juicio politico
Nisman dejo 600 horas de escuchas telefonicas que muestran los dialogos desde la Casa Rosada entre delegados de la Presidenta en los tratos secretos con Iran como los que sostuvo el piquetro fascista Luis DELia con el funcionario y agente irani Yussuf Khalil
Que -como en el caso Watergate- fueron inicialmente negadas por el gobierno y la presidente, tambien acusando a la prensa de "conspirar".
La prueba de fuego esta ahora en ver que haran las instituciones judiciales con las pruebas que va acumulando la investigacion del difunto fiscal y las que seguramente encontraran los periodistas de investigacion.
No faltan hechos, faltan garantias como la independencia de poderes, la regla de ley y la transparencia del acceso a la informacion.
Esas fueron las "armas" que permitieron a dos ignotos periodistas de investigacion americanos -Bob Woodward y Carl Bernstein- revelar el uso criminal del poder y poner a Nixon en la obligacion de renunciar.
Esa renuncia fue un punto de partida para la recuperacion de la confianza de los ciudadanos americanos en sus instituciones republicanas.
Queda por ver ahora si en Argentina se puede dar un final como este:
Seria el comienzo de una muy necesitada recuperacion.
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