En otro tirabuzón de su picada flamígera, Aerolíneas Argentinas paraliza Ezeiza mientras sus pilotos y copilotos se pelean a trompadas a nombre de sus respectivos gremios.
El caos de Aeroparque, los 2 millones diarios que pierde la inflada Aerolíneas, los escándalos de coimas y sobreprecios, los 500 empleados por avión con que operan los vuelos semivacíos con pasajeros que no pagan no son sino una muestra casi metafórica de la Argentina aislada creada por los Kirchner.
Aviones tomados por pasajeros
Las clasicas y tumultuosas peleas de los pasajeros encerrados en los aeropuertos
Los paros de los 10,000 empleados divididos en infinitos sindicatos por aumentos para alcanzar a la inflación
Y ahora, tras la muerte de quien creó el "modelo" y lo manejaba con poderes absolutos, los argentinos contemplan con terror su reemplazo en la cabina por quien era hasta ahora una dedicada azafata.
El poder absoluto no sólo corrompe (y hasta mata) a quienes lo detentan. Ocho años de caos han transformado a la vapuleada Argentina en un gallinero-manicomio en el que todos los "incluídos" luchan entre sí.
Como ilustran los caos callejeros y los grupos de choque desbordados de Milagros Salas en Jujuy:
Con estos objetivos
Y estos resultados
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Referencia
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2 comments:
En el caos psicótico de la Argentina kirchnerista, Aerolíneas es sin duda un modelo que se repite.
Basta escuchar los alaridos furibundos en Ezeiza para darse cuenta que se entra en una sucursal del manicomio dirigida por los enfermos.
El nivel de locura de esta última década es especialmente impresionante y peligroso, porque la neura se ha contagiado desde el poder a las calles, veredas, aeropuertos y todos los ámbitos públicos.
Los argentinos viven encerrados en sus casas, como los neuróticos del chiste viven encerrados en los castillos de aire que construyen los psicóticos.
En este caso, el alquiler lo cobra el gobierno en vez del psicoanalista...
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