"Yo y el líder de la nación libia hemos sido militantes políticos, desde muy jóvenes, hemos abrazado ideas y convicciones muy fuertes y con un sesgo fuertemente cuestionador del status quo que siempre se quiere imponer para que nada cambie y nada pueda transformarse".
Cristina Kirchner, 21 de Noviembre de 2008, visita a LibiaEl colapso de la dictadura de Gaddafi suma un nuevo recuerdo vergonzoso al álbum de amigos y aliados de Cristina Kirchner.
Para un país ya aislado en 2003 del flujo de inversiones como paria financiero, condenado por su propia elección a pagar el 15 % anual a Venezuela para financiarse y con niveles africanos de riesgo país a pesar de 8 años de boom sojero, las alianzas no pueden ser más autodestructivas.
Convertida en cola de barrilete de su financista venezolano -que interviene regularmente en las elecciones argentinas financiando las campañas - el gobierno de Cristina Kirchner ha venido profundizando relaciones con todos y cada uno de los regímenes más autoritarios, violadores de derechos humanos y tóxicos del planeta:´el Irán de los ayatolas, la Cuba de los hermanos Castro, la Venezuela de Chavez y las autocracias de Libia, Egipto, Siria y Marruecos.
La explicación de esta política exterior suicida es doble: atender al mercado interno de la izquierda petardista para sumar los únicos votos disponibles para evitar una fatal segunda vuelta en 2012 y -no menos importante- acceder a fondos de dinero lavado que fluyen desde Libia, Iran y Venezuela al Banco del Sur y otras entidades fantasmagóricas instrumentadas en la visitada isla Margarita.
Los proyectos de negocios con Gaddafi y Mubarak -por los que Cristina Kirchner hiciera una intensa gira a Libia y Egipto- han entrado en un colapso inesperado, como antes lo hicieran los intentos con China.
La ideología del régimen kirchnerista -como la de su patrocinante venezolano- trata de cubrir una dictadura civil de hecho, instrumentada mediante la combinación de corporativismo, clientelismo y capitalismo de cuates, con ropajes aceptables para captar los votos de la izquierda hidrofóbicamente antiamericana.
Pero el genocidio libio y la rebelión del Medio Oriente contra las dictaduras aliadas deja al régimen argentino en una situación insostenible: a los escándalos internos desatados por los arrebatos y corrupción de Hebe de Bonafini y la indisimulada financiación iraní de los grupos de choque del inefable D´Elía se suma ahora la verguenza internacional de la asociación y apoyo a un régimen que predica y practica el genocidio.
Para la izquierda europea, ha llegado un embarazoso y revelador momento de la verdad: no son los americanos los que sostienen a los regímenes dictatoriales a cambio de petróleo y negocios.
Los fondos de Mubarak y de Gaddafi descansan protegidos en bancos de la UE.
Seguirán los argentinos creyendo en las sinceras palabras de su gobierno, o comenzarán a creer en sus ojos mentirosos?
_________________________________
Referencias
- Clarin (2011) Chávez salió a respaldar públicamente a Gaddafi
- Reato, C. (2011) Porqué CFK y sus aliados no critican la violencia del dictador Gaddafi. Perfil
- Cozar & Telon (2011) El régimen libio dispara a matar contra las protestas en Tripoli. El País
- El Pais (2011) La ignominia de los europeos
- Financial Times (2009) Chavez and Gaddafi join forces to "redefine terrorism"
- Rathbone, J. P. (2011) Gaddafi´s Latin American allies tread carefully. Financial Times
- Petroleum World (2006) Chavez´ money laundering
- Aron (2009) Argentina: el retorno de la dictadura
1 comment:
"Genocidio", "crimen de lesa humanidad","terrorismo de Estado"... cada gargara del discurso hipocrita del kirchnerismo ha quedado en grotesca evidencia para quienes creen en sus "ojos mentirosos" y no en las "sinceras palabras" de quienes los someten.
Post a Comment