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Sunday, February 27, 2011

Derechos Humanos para Libia ?: otra repentina amnesia bolivariana


Mientras el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas reporta a Gaddafi ante la Corte Internacional de Justicia Criminal (ICC), Human Rights Watch y Amnesty International denuncian el genocidio que está llevando a cabo en Trípoli y la Liga Árabe reclama la renuncia del dictador y el cese de la masacre contra sus propios súbditos, Venezuela, Cuba y Argentina parecen haber archivado el tema.


El uso de los "derechos humanos" como método de propaganda para proteger a los aliados políticos e ideológicos que los violan regularmente ha quedado una vez más en evidencia.

Las Madres de Plaza de Mayo no sólo apoyan a los hermanos Castro mientras éstos mandan a grupos de matones a vapulear a las Damas de Blanco -las Madres de los cubanos desaparecidos y detenidos por delito de opinión- sino que también reciben fondos de Chávez y de Gaddafi.

No son los de Gaddafi "crímenes de lesa humanidad" incluso para la falaz definición propulsada por el eje Caracas-Habana-Buenos Aires? Debería haber renunciado al poder para poder masacrar a sus ex gobernados "desde el llano" y así eludir la categoría máxima de repudio de los pseudo defensores de los DDHH, pero no lo ha hecho.

Los "DDHH" bolivarianos son tan creíbles como la "lucha por la paz" de la URSS colocando misiles en Cuba o el "antiimperialismo" predicado por los tanques rusos invadiendo Europa Oriental y Afghanistan -o los tanques libios invadiendo Chad en la "guerra de los Toyotas"-.

Como los tres monitos del proverbio, los seguidores del "socialismo del siglo 21¨y sus variantes no sólo optan por callar, sino por pedir silencio y acusar a "los medios" que no pueden controlar con sus leyes-mordaza locales.

Repentinamente Al-Jazeera, Amnesty y Human Rights Watch se han vuelto enemigos.

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Referencias
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1 comment:

Octavio Paz said...

Por la frecuencia con la que quedan en publico con los pantalones bajos, Castro, Chavez y Kirchner deberian dedicarse a hacer reir en vez de -como ahora- hacer llorar.
Pero en la America Latina colonizada por la teoria de la dependencia -segun la cual todos los males vienen de fuera y la plata se la llevan los que nos prestan, aunque se vea en los yates y pisos de lujo de los que defaultearon los prestamos- se vive en lo que Maria Elena Walsh sabiamente bautizo "el mundo del reves".
Cuando hayamos aterrizado de cabeza nuevamente tal vez recuperemos el sentido comun.