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Thursday, July 2, 2009

El saqueo y colapso del Estado en la Argentina de Kirchner


Con la epidemia de gripe A afectando a por lo menos 100,000 argentinos como consecuencia de que el gobierno anticipara las elecciones generalizando y potenciando el contagio a los niveles actuales, el responsable de "nacionalizar" Aerolíneas Argentinas buscado por la Justicia y próximamente por la policía, es hora de revisar el "debate" sobre el "rol del Estado" que los pseudoprogresistas y pseudonacionalistas tratan siempre de plantear como su causa patriótica y razón de ser.

Comencemos por las funciones del Estado en las que Milton Friedman, Karl Marx y Hugo Chavez estarán completamente de acuerdo, y veamos la "performance" del "gobierno popular" en cada uno de ellos:

Salud

Los hospitales no tienen camas ni medicamentos para atender una pandemia declarada hace ya casi un año, en la que países notoriamente atrasados como México y Brasil han cerrado las ciudades, cancelado actividades y evitado el contagio.

Educación

Con un récord histórico de días de clase perdidos, la Universidad de Buenos Aires paralizada sin rector y sin presupuesto por años y la Facultad de Odontología cerrada por la muerte evitable de profesores y alumnos contagiados en sus baños sin jabón ni sanitarios, la Argentina ha descendido sus resultados de test de aprendizaje por debajo de Brasil y Chile, a los que tradicionalmente aventajaba.

Un récord de alumnos se registra en colegios y universidades pagas ante la imposibilidad material de estudiar en las aulas del Estado.

Y los resultados de los tests de rendimiento muestran que -a pesar de aumentar el presupuesto para escuelas públicas- el rendimiento escolar ha caído como una piedra frente al de los colegios privados (sólo 10% de los niños de 6to grado en colegio estatal logra escribir en nivel "alto" contra más del 50% de los niños en colegios privados)

Seguridad

Los récords de crimen y difusión del comercio y consumo de drogas en todo el país han convertido desde 2002 al GBA en un Far West regido por el narcotráfico, el secuestro "express" y la prostitución, en el que se registran récords de asesinatos irresueltos ante la impotencia de una policía mal equipada, corrupta e insuficiente con órdenes de "no reprimir".

Las manifestaciones de cientos de miles de personas lideradas por padres de víctimas de los tiroteos y homicidios cotidianos han sido recibidas con absoluta inacción, lo que ahora se traduce en récords de compra de armas por familias que viven rodeadas de criminales cada vez más audaces y despiadados.

Se establece de este modo en Argentina, la "dictadura del lumpen proletariado", que hubiese horrorizado al mismísimo Karl Marx.

Justicia

Los jueces digitados políticamente por el Consejo de la Magistratura han resultado aún más incapaces que los dejados por el gobierno anterior. Las directivas de "no reprimir" y "evitar el gatillo fácil" han hecho fácil el gatillar de los ladrones comunes de gallinas a la menor sñal de resistencia a su autoridad -la única, la ley de la selva- sobre los ciudadanos comunes.

Informacion y comunicaciones

Además de la continua demonización de la prensa de todo tipo -a excepción de diarios sostenidos por el gobierno como Página 12- , el gobierno distorsiona todos los índices económicos mediante la intervención al INDEC, paralizando las transacciones económicas, haciendo imposible el crédito y destruyendo la escasa credibilidad internacional de la Argentina como mercado o socio comercial.





Servicios públicos

Desde el transporte y el abastecimiento hasta el agua corriente y la energía, el régimen actual ha proclamado la responsabilidad primaria y a menudo exclusiva del Estado en la provisión de servicios públicos.

En la realidad, tanto las empresas estatales o estatizadas como los monopolios por privatización (como telecomunicaciones o energia) o por nacionalizacion (como trenes y aviones) están en estado de colapso permanente desde 2002, a pesar de 7 años de récords de recaudación directa e indirecta. Los trenes siguen sin funcionar, los aviones vuelan con funcionarios que no pagan, los cortes de energía eléctrica y apagones son parte de un rito estacional (se corta cuando hace falta usar aire acondicionado o cuando hace falta calefaccionar) que afecta a hospitales, escuelas y empresas generadoras de empleo.

Banca y servicios financieros

Privados por el default de 2002 y el corte de relaciones con el FMI de 2003 de acceso al crédito no usurario internacional, el estado ha de hecho sostenido una banca seminacionalizada que cobra intereses a productores y particulares al triple de las tasas de países vecinos.

Como consecuencia de la inexistencia de crédito interno, la economía se ha dolarizado y el empleo se ha vuelto informal o clandestino para el 40% de la población, deprimiendo el consumo interno y subiendo continuamente los precios.

Alternativa: un estado fuerte y eficaz al servicio de miles de emprendedores

Quienes abogan -como nosotros- por un estado tan fuerte y eficaz como el mercado, saben que los roles antes mencionados no sólo tienen la función de proveer salud, educacion, justicia ,servicios públicos y financieros a los particulares que los consumen, sino a los miles de PYMES y actividades productivas que los requieren -desde los chacareros exportadores hasta los hoteles y restaurantes que atienden a los turistas o las tiendas en barrios renovados por emprendedores como Palermo (cuyo caso hemos comentado como ejemplo)

Las consecuencias de cada catástrofe por destrucción del Estado generada por el autodenominado "gobierno popular" de los Kirchner ser traducen rápidamente en los ejemplos siguientes e inmediatos:

  1. Inseguridad: ahuyenta el turismo (que genera 15 % de las divisas que entran al país), encarece los alquileres y disminuye el valor de la vivienda construída
  2. Crisis sanitaria: destruye al turismo externo e interno (ya hay una caída de más del 50% de las reservas hoteleras, consumo en bares y restaurantes en todo el país) al obligar a la cuarentena preventiva que podría haberse evitado con medidas agresivas como las de México o China (que sigue exportando y hospedando Juegos Olímpicos con gripe aviaria y porcina a la vez)
  3. Falta de seguridad jurídica, crédito y servicios públicos: la actividad exportadora de granos ha caído a las menores áreas sembradas en Argentina y las empresas productoras la han trasladado a Brasil y Uruguay para cubrirse de expropiaciones por manipulación del tipo de cambio, retenciones y falta de crédito para siembra y cosecha.

Mientras el estado en países como India, China, Chile, Colombia o Brasil sostiene desde hace décadas el crecimiento económico récord proveyendo infraestructura de primer mundo (crédito, electricidad, servicios publicos, acceso a Internet) a los cientos de empresas locales que se alojan en centros y polos de desarrollo como Mumbai, Shangai, los productores viñateros, cafeteros o aeroespaciales, en la Argentina hace exactamente lo contrario.

No solamente no provee ni garantiza ningún soporte o servicio, sino que se constituye en una fuente continua de problemas y amenazas para el desarrollo de las actividades exitosas.

Hoy el renacido Palermo enfrenta una "tormenta perfecta" generada por el Estado destruído y saqueado en nombre del "nacionalismo económico": epidemias evitables que derrumban el turismo externo y el consumo interno, costos disparados por servicios que no se prestan combinados con caída del valor de las propiedades y aumento de los alquileres por inseguridad física y jurídica-

El saqueo del Estado no varía en lo esencial al reemplazar las privatizaciones digitadas y monopólicas por las nacionalizaciones y estatizaciones digitadas y monopólicas.

Peor aún, al ser el gobierno juez y parte en el caso de las nacionalizaciones, el riesgo jurídico se hace total -como lo delatan la fuga récord de ahorros al Uruguay, la dolarización de la economía y la ausencia de ofertas de compra por activos públicos-.

Sin Estado ni mercado y asediados por una epidemia, los argentinos se enfrentan a un nuevo colapso encerrados en un mundo irreal como el de las epidemias de fiebre amarilla del siglo 19.

El gobierno "progresista", que consideraba su deber "controlar" el uso de las jubilaciones privadas, ha proclamado que "respeta las libertades individuales (sic)" para que cada argentino se las arregle como pueda para enfrentar la epidemia.

"Socialismo" para apoderarse de ahorros y renta ajenos, "liberalismo" para desentenderse de sus obligaciones de proveer salud, educación y seguridad.

Ni cortos ni perezosos, los argentinos han ya cruzado al Uruguay (por esos puentes que el nacionalismo patriotero cortaba) para llevarse todo el Tamiflú que puedan encontrar en las abastecidas farmacias uruguayas (que ya se cubren de probables revendedores)


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Referencias

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3 comments:

Discepolin said...

Excelente y certero como siempre, Perito: puso el dedo en la llaga progresista.
Estos atorrantes saquean el Estado y lo paralizan en todas sus funciones mientras declaran hacer lo contrario.
El colmo de la hipocresia -que usted bien marca- es culpar al "crecimiento" de la demanda de la falta de servicio, cuando es a todas vista lo contrario.

Macedonio said...

Esta es la semilla del mal: el saqueo del Estado. No hay diferencia alguna entre Dromi-Menem y De Vido-Kirchner.
Primero privatizan entre amigos para cobrar la coima y hacer caja privada y luego estatizan para hacer lo mismo por segunda vez-
No se preguntaron nunca porqué los mismos nombres y socios cambian camisetas a los saltos entre el menemismo y el kirchnerismo?

Bertrand Russell said...

Algunos datos adicionales, don Perito, del articulo de La Nacion: http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=927831

Cada 60 minutos se contratan 18 nuevos empleados públicos. Van ya 161.000 en medio año 2009.

Miceli dejó 551 empleados nuevos en sus meses de Economía

De Vido agregó entre 2006 y 2007 otros 1,542.

Tomada, el Ministro de Trabajo en un país con 4 millones de desocupados desde 2003, aumentó de 3600 a 5800 empleados.

Y ademas los que no se cuentan porque estan en empresas estatizadas que no se suman a la planta estatal "oficial" pero se pagan (más alto) de los fondos estatales:

Por ejemplo, no se cuentan los 13.704 empleados del Correo Argentino, que volvió a la órbita estatal luego de que se le rescindiera el contrato al Grupo Macri, ni los 4298 que trabajan en Agua y Saneamientos (AySA), que hasta febrero de 2006 eran empleados de la francesa Aguas Argentinas y que pasaron automáticamente a la estatal AySA cuando se revocó la concesión.

Y tampoco están dentro del listado de los empleados públicos nacionales los cerca de 100 que se distribuyen entre dos de las creaciones estatales del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido: Energía Argentina (Enarsa) y Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (Arsat).

Tampoco cuentan los trabajadores que antes corrían las unidades de Trenes Metropolitanos, la concesionaria ferroviaria de Sergio Taselli a la que le fue rescindido el contrato, acusada de prestar un servicio deficiente. En Metropolitanos, entre las líneas Roca, Belgrano Sur y San Martín, hay alrededor de 5000 empleados que ahora dejaron de pertenecer al sector privado y forman parte de una sociedad llamada Belgrano SA, en la que el Estado es el accionista principal.

Es decir, deberían contabilizarse alrededor de 23.000 empleados más sólo con un cambio metodológico. Si esto fuera así, la administración pública nacional aumentó a razón de 54 empleados por día desde que el Presidente se hizo del sillón de Rivadavia.