Los resultados de las tres mayores economias de America Latina: Brasil, Mexico y Argentina reflejan el resultado de dos decadas de politicas populistas y proteccionistas: mientras que el Sudeste de Asia cuadruplico su crecimiento con politicas de libre comercio y enfasis en la exportacion, America Latina redujo su PBI por habitante al igual que el Africa subsahariana.
The Economist muestra con claridad como las politicas proteccionistas de Chavez, Lula y Kirchner redundaron en una caida del ingreso debido a un estancamiento o reduccion del comercio exterior. Los mercados internos cerrados no pudieron sostener el nivel de ingresos, menos aun incrementarlo.
Este es un dato clave, porque no estamos hablando de un solo periodo de gobierno -aunque los populistas se eternizaron por una media de 15 anios en el poder en Brasil, Venezuela y Argentina- sino de una tendencia clara a lo largo de dos decadas.
Aprenderan la leccion? Lo dudamos.
El populismo tiene las mismas caracteristicas de una adiccion. Como con el alcoholismo o las drogas, produce una sensacion transitoria de bienestar al mismo tiempo que destruye el organismo y elimina gradualmente la voluntad y la autonomia respecto de la "droga".
Los subsidios "sociales" -como Bolsa Trabajo en Brasil, las Misiones de Venezuela o los "Planes Trabajar" y la "Asignacion Universal por Hijo" en Argentina- han ocultado antes que eliminado la pobreza, reduciendo los incentivos al trabajo productivo y el emprendedorismo.
La "proteccion" de las barreras aduaneras ha aumentado el costo de vida y desalentado la produccion de alimentos y bienes utiles, transfiriendo ingresos a una minoria de "amigopolios" protegidos que han lucrado con mercados cautivos aumentando precios y rentabilidad sin aumentar la produccion.
El resultado ha sido que los habitantes de America Latina necesitan cada vez mas dolares para comprar menos bienes y servicios, en un espiral de pobreza que ha hecho ya eclosion en Venezuela, Brasil y Argentina.
Pero las politicas populistas -como el alcohol para el borracho o la droga para el adicto- sigue siendo popular y arrastrando votos, dificultando el cambio en tanto requiera algun grado de reduccion de subsidios para bajar impuestos o importar insumos que hagan exportables a las industrias locales.