Mientras los que protestan contra Wall Street para reclamar la continuidad de los subsidios clientelistas que quebraron a sus estados de beneficencia -exactamente lo que hace falta para terminar de sumirlos en la más absoluta crisis-
, vale la pena recordar las agudas reflexiones con las que Milton Friedman hizo trizas hace 30 años los mismos argumentos contra "la codicia" en un popular programa de Phil Donahue, simplemente haciendo preguntas que dejaron en evidencia la incoherencia de los mismos argumentantes y -más gravemente- su falta de ideas prácticas y viables para mejorar el sistema que critican.
En el caso de los organizadores de la lucha contra la codicia de Wall Street, la propia codicia no ha sido modesta a la hora de vender T-shirts, merchandising,
recolectar un millón de dólares de los chorlitos que duermen en la plaza y crear ...su
propio banco "comunitario" (con tarjetas de crédito incluídas) e incluso
registrar como "marca registrada" la propiedad del nombre.
Las
disputas por dinero no se han hecho esperar entre los oportunistas que tratan de ordeñar la vaca de la protesta antes que se le acabe la leche -como ya ocurrió con los ecologistas, los "comités Betancourt", las asociaciones internacionales de "derechos humanos" y otros buzones de moda-.
Este es, sin embargo, un negocio modesto comparado con el premio máximo: manejar fondos públicos como los
piqueteros argentinos , asegurar pensiones vitalicias como los eurodiputados
Daniel Conh-Bendit -ex líder del Mayo francés de 1968 y actual parlamentario por el Partido Verde-y el insólito candidato piquetero Raúl Castells (ex candidato a gobernador) que paso de los "piquetes culturales"
a ambiciones algo mayores
o formar una milicia propia y controlar una provincia como la piquetera Milagro Sala en Jujuy
"Ponerse al frente" de los indignados es algo sencillo -como explicó magistralmente Chaplin en su memorable film Tiempos Modernos, filmado en plena Gran Depresión (1936).
Lo difícil es llevarlos a alguna parte que valga la pena.
No se sale de un pozo -en este caso creado por políticas populistas de crédito barato y subsidios- cavándolo más hondo. El economista Thomas Sowell explicaba 20 años atrás cómo los sistemas de subsidios a la pobreza no la eliminan, sino que la eternizan
Y cómo la crisis inmobiliaria fue creada por las políticas clientelistas de gobiernos de derecha -Bush, Aznar- y de izquierda que impulsaron el ladrillo barato mediante créditos suicidas de bancos y cajas comunitarias que controlaban con "acciones de oro" y regulaciones de encajes a personas insolventes o engañadas con la insólita teoría -también esgrimida para ganar votos- de que el valor de la propiedad siempre subiría más que el del dinero y que el gobierno ayudaría con subsidios institucionales -los fondos de vivienda y las aseguradoras como Freddie Mac y Fannie Mae- a comprar viviendas a más del 50 % de la población
Aquí, un Sowell con canas de 20 años lo vuelve a explicar con ejemplos de la idiotez del día:
Por su parte, el historiador económico Niall Ferguson -que calificó con certera precisión a los "indignados" de
quedarse en el berrinche y pedir exactamente lo contrario de lo que conviene- expuso las falsas dicotomías entre austeridad y estímulo no ahorra certeras críticas a los pedestres argumentos del pataleo.
Lo que hay que precisar es dónde estimular y dónde ajustar. Hay que estimular la producción y el empleo bajando los impuestos directos e indirectos al trabajo, y para ello hay que reducir el gasto clientelista que se vino financiando con la deuda que ahora ahoga a Grecia y amenaza a toda Europa.
Acampar al sereno y mandar mensajes de texto en los conspicuos iPhones no hará mella en la crisis, sino para agravarla. Presionados por votos, los gobiernos piden a los bancos aumentar el capital, y de esa forma, los obligan a aumentar los desalojos y negarse a refinanciar créditos -como muestran en estos días los bancos franceses y las cajas españolas, atrapados entre montañas de créditos irrecuperables y propiedades devaluadas que siguen en caída libre-
Vale la pena escuchar los razonamientos y ver los datos de la realidad que exceden los slogans. Por ejemplo, hay más gente en las colas de cualquier tienda Apple que en las plazas ocupadas por los que protestan contra Wall Street (contando además los muchos que están en la plaza y pasan también por la tienda Apple a comprar apps para sus iPhones y iPads)-
______________________________________
Referencias
________________________________________
No comments:
Post a Comment