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Monday, June 1, 2020

Lecturas recomendadas 73: Tontos, Fraudes y Fanaticos: la Nueva Izquierda analizada por Sir Roger Scruton


Quienquiera que lea alguna obra del recientemente fallecido filosofo ingles Roger Scruton (1944-2020) se dara cuenta rapidamente porque no ha sido traducido al castellano y porque siendo una figura tan famosa en el ambito anglosajon de Estados Unidos y Europa es un casi total desconocido en la America Latina dominada por el pensamiento unico del neomarxismo y el progresismo relativista.

Es precisamente contra este que Scruton dedico su obra filosofica y su considerable talento como escritor, conferencista y maestro de debate. Para quienes quieran verlo en accion recomiendo ver (con tiempo) su exposicion y Q&A en Oxford Union asi como su participacion en Intelligence Square2



Parecera obvio para quienes hayan leido los 75+ articulos de estas Lecturas Recomendadas (ver Indice) que venimos publicando desde 2008 que en muchos casos no coincidimos con todo lo que opinan los autores que introducimos ni estos coinciden en un 100% entre si. De eso se trata el liberalismo.

Pero en lo que dice Scruton sobre los "sumos sacerdotes" del dogma marxista y relativista como Sartre, Althusser, Gramsci y Lacan, no encontramos mas que un laser iluminando las gigantescas contradicciones logicas y absurdos conceptuales que los que los estudiamos sin ser "bautizados" en la juventud de los 60 y 70 en que tuvieron su apogeo nos encontramos perplejos con la nada expresada en miles de palabras.

Aqui algunos parrafos de muestra extraidos de Fools, Frauds and Firebrands, un libro que merece ser leido y sobre todo citado por quienes sufrimos la experiencia de tratar de entender los galimatias de estos autores, hoy instalados en el Parnaso de los fundadores de lo que se ha dado en llamar -sin advertir la ironia del oximoron- la Nueva Izquierda.

El dogmatismo fanático de Althusser:
De que otra forma podemos interpretar pasajes como este?... 
"este estudio (de El Capital) ... solo es posible con una constante y doble referencia: la identificación con y el conocimiento del objeto de la filosofía Marxista que opera en El Capital presupone la identificación con el objeto de El Capital en si mismo -lo que a su vez presupone recurrir a la filosofía Marxista y requiere desarrollo. No es posible leer El Capital correctamente sin la ayuda de la filosofía Marxista que en si misma debe ser leída, simultáneamente, en El Capital mismo."
En puro castellano, la conclusión es esta: ustedes pueden entender El Capital solamente si creen en el. O si quieren, en Latín aun mas simple, credo ut intelligam, como lo puso San Anselmo, cuando analizaba el supremo misterio de Dios: "Creo para poder entender". En otras palabras, tenemos que leer El Capital con fe religiosa, encerrandolos en el pensamiento de su propia validez. Para el científico, la convicción es consecuencia y no causa del conocimiento. Pero es precisamente el fracaso del Marxismo como teoría científica el que requiere la ayuda de la cruzada de Althusser - la tarea de sacralizar los textos de Marx y convertirlos en dogma revelado."
Debo confesar que al leer este párrafo de Scrutton no pude menos que sorprenderme de su precisión para describir mi propia experiencia de estudiar Althusser con el fallecido Raul Sciarreta por alla por los 70s, cuando los esforzados lectores llegamos a las mismas conclusiones. 

La idea que Scruton disecta y crucifica es la del "intelectual de izquierda" como "lider" de una "vanguardia iluminada" que guía una "revolución" no definida con destino final igualmente impreciso (al menos en términos de costo/beneficio para los supuestos beneficiarios) sin preocuparse por responder a los datos de resultados que arroja la realidad.

Y junto con los que estan para reemplazar la realidad medible con palabras abstrusas e interpretaciones subjetivas que siguen el orden nihilista de "toda verdad es mera opinion" para negar los datos. A esto pueden seguir dos opciones: 
  1. la mas benigna del relativismo, que huye del problema (o mas bien hace una "retirada estratégica") declarando que "cada uno tiene su verdad" para cerrar cualquier intercambio de datos o de logica desfavorables o 
  2. el dogmatismo de "la verdad revelada" que predicaba Althusser.
El Fraude de Lacan 
Lacan ha sido descripto por Raymond Tallis como "el analista del Infierno", palabras que caracterizan apropiadamente la practica de un psicoanalista que era capaz de atender a diez clientes en una hora, a veces mientras lo atendía su peluquero, su sastre o el pedicuro., y cuya idea de una cura era enseñar a sus pacientes a hablar, pensar y sentir en el mismo lenguaje paranoide de su medico.
Pero tal vez no deberíamos ser tan duros con Lacan en este sentido. Los psicoanalistas no ganan su fama por sus éxitos terapéuticos (tal vez no haya ninguno) sino por sus ideas. Y la fama de una idea surge de su influencia popular, no de su verificación. Así fue con Freud, Jung y Adler. Asi ha sido con Klein, Biswanger, Lacan y muchos mas." 
El culto de  Gramsci y las semejanzas entre fascismo y comunismo

Aquí es donde Strutton hunde su bisturí mas hondo, exponiendo con rigor la obsesión gramsciana con la "hegemonía" de una ideología única (la suya, la revolucionaria) que reemplaza a la del opresor mediante la instalación de la dictadura ideológica por medio de la revolución concebida como el copamiento de los medios de información (los "aparatos ideológicos del Estado" de Althusser) y de las cátedras de humanidades y ciencias sociales en las universidades.

La diferencia entre comunismo y fascismo se diluye rápidamente, como puede comprobar cualquiera que pregunte a un pensador "de izquierda" en que consiste.

Scruton explica porque es tan difícil con suma claridad:

Los figurones de los movimientos de la Izquierda Moderna presentan a sus intelectuales constantemente en estos términos: el mito sobre "el cerebro de Lenin" no es sino una instancia de una hagiografía continua por la que pensadores de segundo orden (como Lenin) son presentados como modelos de intuición y sabiduría, cuyas palabras son las del oraculo y cuyas acciones fueron inspiradas por el conocimiento.
Es quizas mas facil para un escritor Ingles que para uno italiano ver la incoherencia asi como percibir lo que esta trata de ocultar: la profunda similitud estructural entre comunismo y fascismo, tanto como teoría como en la practica, y su comun antagonismo hacia las formas constitucionales y parlamentarias de gobierno. 
Tanto el comunismo como el fascismo involucran el intento de crear un movimiento popular de masas bajo el control de un partido único, en el que haya absoluta cohesión en torno a una misma meta. Ambos requieren la eliminación de toda oposición, por cualquier medio que sea necesario, y el reemplazo del debate ordenado entre partidos diferentes por la "discusión" clandestina entre la elite dirigente del partido único. Ambos requieren tomar control "en el nombre del pueblo" de los medios de comunicación y educación e instalar un comando único de la economía.
Ambos movimientos ven a la ley como algo opcional y a los limites de las garantías constitucionales como irrelevantes, ya que ambos ponen por encima de ellos a "la revolución" dirigida desde arriba con una unica mano de hierro.
Ambos tratan de establecer un nuevo orden social, no mediado por instituciones, basado en una inmediata cohesión y fraternidad. 
Y en la búsqueda de este orden social ideal -que los socialistas italianos del siglo 19 llamaron "fascio"- cada movimiento creo una forma de gobierno militarizado, requiriendo la movilización de toda la población, con oficiales-comisarios a cargo. Estas movilizaciones se convierten en espectáculos públicos casi cómicos, con grandes desfiles y festivales para glorificar las dos ideologias."
Los interesados en Strutton pueden encontrar mas en su libro.

Y también en sus conferencias



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