Pages

Thursday, January 6, 2011

Cuba: el "ajuste progresista" III: el FMI se quedó corto: 1.250.000 a la calle



Desde la semana próxima, la dictadura de los hermanos Castro celebrará su medio siglo de vigencia como la más antigua y última dictadura militar del continente despidiendo a 500,000 empleados públicos como parte de un plan de "ajuste" que contempla dejar en la calle al 25 % de la fuerza de trabajo cubana (1,3 millones en 3 años) para equilibrar las insostenibles cuentas internas.

El sindicato único oficialista colaborará seleccionando a quiénes despedir y a quiénes conservar.

Este acto que expone una vez más el fracaso del sistema económico comunista se suma a la cínica confesión de Fidel Castro, quien sin un ápice de verguenza aceptó que nunca supieron cómo construir el socialismo tras haber declarado previamente que tampoco funciona para Cuba.

Las confesiones seniles no dejan de ser confesiones. La miseria socialista no es la consecuencia de la evidente incapacidad personal de los Castros sino de algo mucho más profundo y sistémico: la naturaleza disparatada y reaccionaria del sistema soviético replicado durante casi 80 años en más de 25 países con el mismo resultado: montañas de pobres, hambrunas, terror, violación de los derechos humanos elementales consagrados en la Declaración de las Naciones Unidas de 1948 y por sobre todo, la institucionalización y difusión goebbelsiana de las mentiras en las que se basa el sistema.

Los Castro seguirán ajustando el cinturón a sus súbditos con mucha más crueldad que el FMI que denuncian con sus mucho más hipócritas seguidores bolivarianos por las mismas razones económicas que no aceptan distinciones ideológicas: cuando no se produce lo suficiente para poder sostener el nivel de vida -aún el de miseria haitiana que caracteriza a la seudo revolución castrista- y no se dispone de una lluvia salvadora de exportaciones de soja o petróleo no hay otra salida que ajustarse el cinturón en forma interminable.

Queda ver hasta cuándo los cubanos tolerarán el ajuste, especialmente teniendo en cuenta la descomunal evidencia de la prosperidad que podrían tener si simplemente enviaran a los hermanitos Castro al museo de los dictadores de una vez por todas.

Los 3 millones de cubanos que se fueron a vivir a Estados Unidos y remiten un 25 % del PBI cubano a sus parientes cautivos mientras los dictadores y sus acólitos los tratan de "gusanos" son la mejor demostración de cómo podría haber sido -y seguramente será- Cuba sin Fidel y su corte de adulones y burócratas incapaces.

Ahora al menos, el régimen agonizante de los Castro dejará de cobrarle el 10 % de "tasa revolucionaria" a las remesas que llegan del exterior para quienes viven de la "FE" (Familiar Externo")

La verdad se impone a la larga, lamentablemente a costa de penurias para quienes quedan atrapados en la nube de gas bolivariano y castrista que agobia a Cuba, Venezuela, Ecuador, Nicaragua, Bolivia y Argentina, y que ya ha comenzado a producir ajustes violentos en medio del derrumbe económico.



____________________________________

Referencias

______________________________________

2 comments:

Raymond Aron said...

Para hacer aún más evidente la naturaleza militar de la dictadura cubana, los reemplazos recientes que Raúl Castro puso en el gabinete para presidir el ajuste son todos comandantes militares.
Es una medida de la hipocresía de sus defensores que hayan puesto el grito en el cielo contra los Batistas, Trujillos y Pinochets -caricaturizados siempre en uniformes- mientras los seguían vistiendo y discurseaban desde sus tribunas con revólver al cinto.
No sería nada raro que si Cuba sigue por este camino de deterioro tan violento y coloca al ejército frente a los reclamos de los millones de desocupados que están creando, el régimen terminara como el de los Ceaucescu, decapitado por sus propios uniformados.

George Orwell said...

Qué parte de los uniformes militares o del ejército que controla -y somete- a los cubanos a los delirios seniles de los hermanitos Castro no se entiende?
La deliberada negación de esta deprimente realidad habla más del pseudoprogresismo reaccionario que domina por descerebración el arco bolivariano que otra cosa...